La Editorial de la UNLPam (EdUNLPam) inició una colección de libros digitales de tesis y trabajos finales de grado y posgrado, con lo que se abre una nueva línea de trabajo editorial de textos digitalizados que, por su extensión y su estructura interna, se definen como “libros”. Esta iniciativa puede ser comentada desde diferentes puntos de vista.
Desde el punto de vista de la institución universitaria, ya no podemos concebir a la Universidad sólo como un espacio físico donde nos encontramos y desarrollamos nuestras actividades. La Universidad es también una red de interacciones ampliada y expandida a través de las tecnologías de la información y la comunicación y hoy, particularmente, a través de las tecnologías móviles. La mediación tecnológica moviliza esta red en dos sentidos: amplía las posibilidades de interacción de la Universidad con la comunidad local y la sociedad nacional e internacional; y hacia el interior de la Universidad, facilita a sus miembros el acceso a la memoria institucional y potencia la posibilidad de aprender de la propia trayectoria en términos de producción académica.
Desde el punto de vista editorial, los cambios tecnológicos dan cuenta de una situación inédita en la historia. Las tecnologías nos permiten publicar y difundir nuestros propios textos sin intervención de editoriales. Podemos también registrar nuestra autoría a través de organizaciones como Creative Commons, contando incluso con la posibilidad de controlar que sea respetado lo que publicamos en la red bajo esta licencia. Sin embargo, la publicación a título personal en el campo de la producción académica carece de validación, aspecto sustantivo de la comunicación científica. En este sentido, las casas editoriales están llamadas a seguir cumpliendo este rol fundamental.
Pero, ¿qué editoriales asumen esta tarea de validación? La mercantilización de la publicación científica presenta también un nuevo escenario. Los márgenes de ganancia en este mercado han aumentado desde el advenimiento de la era digital y, según estadísticas de 2013, solo cinco casas editoriales participan en más del 50% de todos los papers publicados en el mundo por las revistas científicas indexadas. En este contexto, las editoriales de asociaciones académicas y de las universidades encuentran como desafío avanzar por caminos del desarrollo científico y tecnológico a favor de la sociedad para hacer frente a los valores instalados por las lógicas de mercado.
Por otra parte, entre quienes somos parte de las instituciones universitarias, podemos reconocer que nuestras formas de relación con otros y nuestras actividades laborales, siguen siendo transformadas por la digitalización. El acceso a la información en todo momento y en cualquier lugar, y la colaboración con otros a través de las tecnologías, ya no son posibilidades que nos resulten extrañas. No solo aprendemos a movernos en estos nuevos escenarios, sino que sus prácticas pasan a constituir parte de nuestra cotidianeidad y, en este sentido práctico, los libros digitales dan respuesta a nuevas necesidades.
Con estos tres puntos de vista sobre la edición universitaria de libros digitales hemos querido destacar algunos rasgos de su alcance en la vida institucional, sus implicancias en las políticas educativas y científicas, y su lugar en el mercado editorial, así como también su necesaria presencia en nuestra actividad universitaria cotidiana.
Hebe Irene Roig. Coordinadora del Área de Educación a Distancia
Nota publicada en la revista Contexto Universitario Nº46, diciembre 2016